De concretarse las proyecciones del Banco Central, la economía nacional completaría cuatro años de crecimiento en promedio bajo el 2%. Es por ello que el alto desempeño del Imacec de septiembre fue recibido como una posible señal de recuperación de la economía por parte de sectores del mercado, junto al optimismo manifestado por el Gobierno.

El sorpresivo Imacec de agosto de 2,5% ilusiona al Gobierno y a sectores del mercado con el esperado repunte de la economía nacional, el que podría venir de la mano de una moderación en la fuerte caída tanto en la inversión como producción minera.

Si las estimaciones del instituto emisor se materializan, se completarán cuatro años con un crecimiento promedio inferior al 2%. En vista de ello, el ministro subrogante de Hacienda, Alejandro Micco, enfatizó en que el desempeño del noveno mes del año es una nueva razón para seguir trabajando.

“No es primera vez que Chile tiene bajos niveles del precio del cobre. Hoy tenemos que seguir trabajando. Este es un punto de decir que tuvimos una buena cifra pero tenemos que seguir trabajando y poniendo todo nuestro esfuerzo para retomar mayores niveles de crecimiento”, afirmó Micco.

Hacienda fijó en un 1,75% el crecimiento de la economía para este año, mientras que el Banco Central ajustó su rango desde un 1,5 a 2%. Sin embargo, a juicio del presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio, Alberto Salas, la mayor preocupación radica en el PIB potencial fijado en 3% por el Fondo Monetario Internacional.

“Tal vez lo más preocupante es la estimación a la baja del crecimiento potencial de Chile. Chile merece crecer más, y creo que somos capaces de crecer más. Aquí hay un tema de confianzas, de recomponer confianzas en que todos somos responsables pero que, obviamente, el gobierno tiene un liderazgo en esta materia”, explicó.

A pesar de que el ajuste en la minería podría estar moderándose, para Francisco Klapp -de Libertad y Desarrollo- la proyección de expansión del PIB en torno a 1,7% se mantendría para 2016.

Patricio Rojas, de Rojas y Asociados, enfatizó en la preocupación en torno al alto endeudamiento del fisco, el que -de mantener su ritmo- podría repercutir en un incremento en el costo de financiamiento tanto del sector público como privado.

“Si ese crecimiento se vuelve mucho más grande, más alto, es bastante probable que el sistema financiero internacional empiece a castigar a la economía chilena y se eleve la tasa de interés, lo cual va a ser cada vez mas difícil que se pueda financiar y que sea sostenible el nivel de deuda”.

Sin embargo, actores del mercado coinciden en la necesidad de recuperar la confianza y consiguiente potenciar la inversión en nuestro país. El Gobierno proyectó una expansión del PIB de 2,25% para 2017, mientras que el Banco Central fijó un margen de 1,75 a 2,75%.