Vecinos de Osorno se tomaron el camino hacia la costa en protesta por los residuos tóxicos vertidos por un arrendatario en las cercanías de su población. Aseguran que los malos olores no los deja vivir en paz.

Y es que hace cerca de 8 años se instaló una planta donde se reciben residuos percolados (líquidos domiciliarios) pero en el último tiempo -aseguran-, los malos olores se han acrecentado, ello porque los camiones encargados de trasladar estos desechos, los están virtiendo en un sitio que habría sido arrendado por el dueño de dicha planta y que queda 3 kilómetros más cerca del lugar donde habitan.

Producto de esta situación, los vecinos han debido visitar en diversas ocasiones los centros de salud familiares por dolores de estómago, de cabeza y mareos, entre otros problemas de salud.

A la vez, afirmaron que han realizado las denuncias en las diversas instituciones pertinentes, pero no han tenido una respuesta satisfactoria.

Junto a ello, afirman que no saben si estos desperdicios se están desechando en este sitio para utilizarlos como abono, como una forma de abaratar costos o porque simplemente la planta ya no da abasto, por lo que necesitan que la autoridad sanitaria o la misma municipalidad se acerque hasta el lugar para corroborar cual es la situación de la planta y buscar una solución para poder -como ellos mismos han manifestado- volver a vivir en paz.