Tras sostener una reunión con el papa Francisco en el Palacio Apostólico del Vaticano el sábado 9 de enero, el cardenal Ricardo Ezzati descartó detallar si en el encuentro se habló de la difícil situación que enfrenta la Iglesia Católica en Chile.

Previamente, de manera escueta se había informado que ambos habían dialogado sobre “diversas materias de la vida de la Iglesia en nuestro país”.

La Iglesia Católica ha enfrentado duras críticas por su actuar frente a casos de abusos sexuales. El caso más connotado es el que concierne al ex párroco de El Bosque, Fernando Karadima, acusado de abusos sexuales contra menores.

Esto ha golpeado también la imagen de Ezzati, debido al intercambio de misivas con el ex cardenal Francisco Javier Errázuriz en un intento de minimizar las acusaciones contra Karadima.

Sin embargo, Ezzati afirmó que solo se hablaron “temas del tipo pastoral“, recoge La Tercera, sin ahondar si se trataron situaciones en particular como las continuas protestas en Osorno contra el obispo Juan Barros, ex mano derecha de Fernando Karadima y acusado de encubrir los abusos.

El cardenal confirmó además que las intenciones del pontífice apuntarían a una eventual visita a Chile en 2017, lo que confirma que este año será imposible que el argentino pise suelo nacional.