Niños entre 3 y 4 años participaron en el quinto Encuentro regional palín 2015, el Estadio Municipal de Huechuraba. Los párvulos pertenecientes a 16 jardines infantiles de la Junji, con sello intercultural, jugaron con el pali y el wiño en las canchas en el borde del cerro El Carmen, de la comuna, acompañados por las familias y comunidades educativas.

Uno de los pilares de la JUNJI es la inclusión, por eso se rescata este juego ancestral de la cultura indígena mapuche y se incorpora como parte de sus prácticas educativas, significativas para las niñas y niños.

En la actividad estuvo presente la directora regional de la Junji, María Teresa Vio; el jefe de la Oficina de Asuntos Indígenas de Conadi, Juan Huenulao y el alcalde de la comuna de Huechuraba, Carlos Cuadrado.

“A través de este juego se propicia que los niños y niñas compartan entre sí con respeto sin importar quién gana, se promueve el deporte y a través de él construimos una sociedad mucho más inclusiva”, destacó Grossi quien además valoró la colaboración de la Municipalidad de Huechuraba y su alcalde en esta actividad.

En los jardines infantiles de la Junji en la región hay más de 4.500 niños y niñas pertenecientes a pueblos originarios y gracias al convenio con la Corporación Nacional Indígena, Conadi, se cuenta con jardines interculturales, en los cuales se enseña desde los primeros años, a valorar, preservar y reconocer la cultura de los pueblos ancestrales.

El Palín es más que un deporte, es un encuentro social, mientras los equipos disputaban la pelota, las familias comparten alimentos y alientan con sus cantos ancestrales.

13 comunas de la Región Metropolitana estuvieron representadas en este campeonato infantil. Los dueños de casa Jardín Infantil Estrella Andina de Huechuraba; Carrito de Ilusiones de Puente Alto; Mundo Feliz y Poyentü Mapu de San Bernardo; Los Aromos de Pudahuel; Iluña Poreko y Antawara de Macul; Taiñ Folil de Lo Prado; Pu Peñi y Kipai Antü de La Pintana ; Kim Ayelen de Lampa; Las Pequitas de Recoleta; Pewmayen de Peñalolén; Relmü de Cerro Navia; Antü Mahuida de La Florida y Kim Ruka de Maipú.