Pobladores del sector Carrizales Bajo de la comuna de Ránquil, vecinos de la planta de celulosa Nueva Aldea, presentaron una denuncia en contra de la empresa Arauco a la que acusan de incumplir normas ambientales en perjuicio de cientos de personas.

Si bien los afectados iban presentar la acción en la oficina regional de la Superintendencia de Medio Ambiente, inaugurada hace dos semanas, increíblemente ésta no tramita aún presentaciones, por lo que debieron hacerlo ante el Servicio de Evaluación Ambiental.

Aseguran que en 9 años de lucha pacífica, nada han conseguido. Según el dirigente Eliseo Álvarez, ya se agotaron del deterioro de su calidad de vida.

La presentación administrativa indica que pese a conocer las autoridades de la región el problema que aqueja a los vecinos, han hecho caso omiso de la situación.

Por esto, la abogada Paula Villegas los acompañó a pedir formalmente la instrucción de un procedimiento administrativo sancionatorio, el cual esperan culmine con la clausura de la planta.

En recientes visitas a la zona, tanto al ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, como al superintendente de Medio Ambiente, Cristián Franz, se les consultó por las denuncias de los vecinos de Nueva Aldea, y donde ambos manifestaron estar al tanto de la situación. Sin embargo, de manera formal hasta ahora sólo se han instruido sumarios sanitarios.