La Contraloría anuló la destitución del administrador municipal de Quillón y además dictaminó que el concejal Raúl Fuentealba debe devolver a la brevedad más de medio millón de pesos por el uso que dio una tercera persona a su celular municipal desde el extranjero.

En febrero del año pasado el concejal de Quillón, Raúl Fuentealba, le pasó el celular municipal a una tercera persona para que lo llevara a Argentina y así mantener contacto fluido y permanente. El costo de las llamadas superó los 623 mil pesos y la Contraloría ordenó al edil a pagar a la brevedad la totalidad de la suma.

El alcalde de Quillón, Alberto Ghyra, dijo que el dictamen del ente fiscalizador hay que cumplirlo y que el concejal Fuentealba debe pagar en una sola cuota, ya que no cumplió con un plan de pago que se habría acordado entre las partes. A partir de ello es que antes de 30 días debe cancelarse el total de la deuda.

El hecho generó una fuerte discusión donde Fuentealba acusó una persecución en su contra y argumentó en que nunca se le notificó el cómo debía pagar los más de 600 mil pesos por el uso del teléfono celular municipal desde el extranjero.

Cabe destacar que la Contraloría dejó sin efecto la destitución del administrador municipal que realizaron cuatro concejales de Quillón mientras el alcalde se encontraba hospitalizado en estado grave. El argumento del ente contralor para echar por tierra la medida tomada por los ediles se fundamenta en la falta de quorum y por no haber incluido al jefe municipal en el acuerdo.