Que nuestra mente afecta, para bien o para mal, la salud de todo el cuerpo humano es una idea cada vez más confirmada por la ciencia. El portal neoyorquino Little Things se basó en la opinión de diferentes expertos para analizar en específico la relación que tienen los problemas emocionales con el dolor físico que experimentamos.

¿Puede esta vinculación ser tan directa para que una afección como el estrés perjudique a una parte específica del cuerpo, como los tobillos?

Vamos por parte, lo primero es aceptar que la relación existe. Susanne Babble, psicóloga especializada en traumas y depresión, asegura en su trabajo, publicado en la revista Psychology Today, que “varios estudios han mostrado que el dolor crónico no solamente es causado por algún daño físico, sino también por el estrés y los problemas emocionales».

La psicóloga va más allá y afirma que el dolor físico tiene la función de actuar como alarma en estos casos, de advertir al individuo sobre un trabajo emocional pendiente.

Una primera y lógica manifestación física de las complejidades emocionales y mentales son los dolores de cabeza. Al respecto, la doctora Christina Peterson dijo a Little Things que “el estrés y los desencadenantes emocionales son causas de la migraña común. También lo es asumir demasiadas responsabilidades a lo largo del día”.

COM SALUD (CC) Flickr

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Relaciones específicas

Lori D`Ascenzo, experto en kinesiología y reiki, asegura que “tu cuello es de donde se agarra tu remordimiento y autoinculpación“. Algunos casos serían el juzgarte mucho o, por el contrario, no hacerlo en lo absoluto, postergando un análisis personal. Lori asegura que para aliviar tensiones concentradas en el cuello siempre será beneficioso pedir esa disculpa adeudada o hacer una lista con las cosas que nos gustan de nosotros mismos, según sea el caso.

Similares tensiones se acumulan en los hombros. Sobre ellos “soportamos nuestras cargas. Hablamos de soportar un problema y esto es exactamente lo que estamos haciendo cuando nuestros hombros se tensan y nos causan dolor“, asegura el kinesiólogo Ros Kitson. Como no siempre las soluciones dependen de uno, el experto advierte que es el momento de, al menos, compartir el dilema con alguien más y solicitar ayuda.

Respecto del dolor de codos, es el doctor Alan Fogel quien publicó en el Psychology Today. Luego de afirmar que “todas las emociones tiene un componente motor”, dijo que esta afección en particular tiene relación con estar oponiendo resistencia en la vida diaria, o con tratar de impedir un cambio. Fogel recomienda aceptar el nuevo compromiso o simplemente probar el cambio y aceptarlo como algo positivo.

D`Ascenzo agregó que las manos son el órgano encargado del contacto con los demás y que un dolor crónico en las palmas puede significar un problema para entablar relaciones con el resto. El experto recomienda conectar con amigos o hacer nuevos, de modo de evitar realizar muchas actividades solo, siempre será mejor almorzar acompañado o ir al cine con alguien, asegura.

Adaobi Anyeji que posee una consulta de psicología en California, asegura que la depresión está directamente vinculada con las piernas y los pies. De este modo un dolor crónico en las extremidades bajas podrían ser indicador de demasiada negatividad. “Tú puedas buscar la felicidad en el nuevo bebe de tu prima o primo. Podrías también desear encontrar la felicidad en una nueva mascota o hobby”, son algunos de los consejos del especialista.