Son cada vez más los Comités de Vivienda que ven el sueño de la casa propia como una meta a largo plazo. El problema surge a raíz de una serie de circunstancias que a juicio de estas organizaciones son trabas, ya sea por las dificultades del Plano Regulador de Osorno, la desinformación de las autoridades provinciales del Serviu, así como también el monopolio de las constructoras mobiliarias.
La presidenta del Comité de Vivienda Proyectando Futuro 3, Carmen Pérez, explicó que por un lado está el obstáculo del Plano Regulador de Osorno y por otra parte la poca idoneidad de las autoridades provinciales para guiar a los Comités de Viviendas, considerando que se certificaron como Comité con la idea de que sería más fácil obtener la casa propia, pero no fue así.
Agregó que por otro lado ven el monopolio de la constructora Martabid en los futuros proyectos habitacionales, que sólo opera a través de créditos hipotecarios, lo cual impide la oferta de otras empresas que quieran trabajar con proyectos de viviendas sociales.
Pérez, puntualizó que todos los comités de viviendas están certificados como grupos vulnerables y que han hecho el esfuerzo de ahorrar 750 mil pesos para la casa propia, por lo que sólo están pidiendo el derecho de tener una vivienda.
