Junto al excelente tenor francés Christophe Berry, la cantante chilena encabeza el elenco estelar de la obra de Delibes en el Teatro Municipal de Santiago, cuyo estreno fue el miércoles y volverá a presentarse este sábado 12.

Por Joel Poblete

Este año se cumple una década de su debut en el Teatro Municipal de Santiago, escenario en el que ha cantado en más de una decena de títulos líricos, incluyendo las protagonistas de “Lucia de Lammermoor” y “La hija del regimiento”; pero aunque ha continuado actuando ahí en todas las temporadas tanto en óperas como en conciertos, desde 2011 que no interpretaba el principal rol femenino en una obra para la escena dentro de la temporada oficial. Hasta este miércoles 09, cuando la soprano chilena Patricia Cifuentes, una de las figuras más activas y elogiadas de la escena operística local, encarnó por primera vez en su carrera el exigente personaje titular de “Lakmé”, de Léo Delibes, en el estreno del elenco estelar en el Municipal.

Y en verdad Cifuentes ofreció una de las mejores interpretaciones en su aplaudida trayectoria. Bella y convincente en escena como la sacerdotisa que vive un amor prohibido con un oficial inglés en la India colonial del siglo XIX, manejó y proyectó muy bien su material vocal, tanto en las escenas más líricas como en las demandantes coloraturas y notas altas de su principal momento solista, el “aria de las campanas”; el fallido agudo final con el que culminó ese instante fue sólo un pasajero traspié en una función muy meritoria, que confirmó una vez más las sobresalientes condiciones de la soprano.

Junto a la protagonista, en su debut en Chile se lució el excelente tenor francés Christophe Berry como su amado, Gérald, quien junto con demostrar tener más rodaje en el rol que su colega del elenco internacional, exhibió una voz hermosa, de adecuado volumen y proyección, agudos seguros y muy bien emitidos, y tal como era de esperar, el mejor estilo de canto francés de la velada, refinado, sutil y apasionado según correspondiera, en especial en los dúos con Lakmé.

Como Nilakantha, el siempre sólido barítono chileno Ricardo Seguel destacó una vez más por su canto firme y sonoro y fue muy aplaudido, aunque en algunas zonas de su voz convenció menos que en otras ocasiones. Y los roles secundarios estuvieron bien cubiertos por otros intérpretes chilenos, en especial por la mezzosoprano Gloria Rojas como la sirvienta Mallika, quien destacó en el célebre “dúo de las flores” junto a la protagonista; por su parte, el tenor Nicolás Fontecilla dejó una grata impresión en su debut en el Municipal en 2012 con un breve pero lucido personaje en “Lucrezia Borgia” y luego encarnando otros papeles, pero en esta ocasión, interpretando al criado Hadji, su voz denotó un excesivo vibrato que es de esperar controle en futuras actuaciones. Adecuado el Frédéric del barítono Ramiro Maturana, así como Carla Vilches (Ellen), Sonia Vásquez (Rose) y Lina Escobedo (Señora Bentson), aunque en el caso de estas últimas, sobresalieron más y estuvieron más chispeantes sus colegas que interpretaron el trío de mujeres británicas en el otro elenco.

Eficaz la dirección musical de José Luis Domínguez -con buenos momentos, en especial los de mayor efusión romántica- al frente de la Orquesta Filarmónica de Santiago, y nuevamente muy bien tanto el Coro del Teatro Municipal que dirige Jorge Klastornik, como los bailarines en la coreografía de Edymar Acevedo. Afortunadamente, al igual que el otro elenco, fue una muy buena versión en lo musical, ya que al ver por segunda vez esta bella ópera francesa en el montaje que la trajo de regreso tras 110 años de ausencia en Chile, se hace aún más notoria la primera impresión: por un lado, la puesta en escena de Jean-Louis Pichon es monótona, poco inspirada y no está a la altura de la ocasión, y por otro la escenografía de Jérôme Bourdin, con su diseño único durante los tres actos de la obra, puede tener ocasionales momentos de belleza visual gracias a la acertada iluminación de Michel Theuil, pero no convence ni funciona tan bien como el hermoso vestuario del mismo Bourdin.

El elenco estelar de “Lakmé” tendrá una segunda y última función este sábado 12 de julio, mientras el elenco internacional tendrá sus últimas dos funciones este viernes 11 y el lunes 14 de julio.