Las Fuerzas Armadas estadounidenses han mantenido una presencia secreta en Somalia desde 2007, pese a declaraciones previas en octubre pasado que decían lo contrario, dijeron este jueves funcionarios de Defensa.

Estados Unidos desplegó hasta 120 efectivos en ese país africano y espera impulsar sus lazos de seguridad con el gobierno de Somalia en el marco de su lucha contra los militantes Shebab, vinculados a Al Qaida, dijo a la AFP un funcionario que pidió el anonimato.

Los efectivos estadounidenses que operan en Somalia son fundamentalmente de las fuerzas especiales de los Boinas Verdes, que se especializan en entrenar y asesorar a otros ejércitos, agregó.

La agencia de noticias Reuters fue la primera en informar de la presencia de tropas estadounidenses en Somalia. En octubre del año pasado, el Pentágono había descrito el arribo de un puñado de asesores militares a Somalia como el primer despliegue de fuerzas estadounidense en ese país desde 1993.

El Pentágono había decidido no revelar la presencia militar en Somalia ante temores por la seguridad de las tropas desplegadas y para evitar “sensibilidades” en el gobierno somalí, indicó la fuente.

No obstante, el titular del Comando África, general David Rodríguez, que asumió el puesto en abril pasado, tiene una postura más transparente, particularmente en momentos en que avanza la relación en materia de seguridad con Somalia, agregó.

Funcionarios reconocieron que el despliegue de efectivos en Somalia ha sido un tema muy sensible desde la desastrosa intervención de 1993, cuando dos helicópteros estadounidenses fueron derribados y 18 uniformados murieron en una operación que fue llevada a la pantalla grande con el filme “Black Hawk Down”.

La revelación sobre la presencia ya desde hace un año de soldados estadounidenses en Somalia se produce en momentos en que el presidente Barack Obama se dispone a designar al primer embajador estadounidense en ese país desde que la guerra civil estalló 20 años atrás.

Estados Unidos reconoció al nuevo gobierno somalí en febrero de 2013.

Pese a que los militantes Shebab se ha replegado de Mogadiscio, importantes porciones de las zonas rurales aún son controladas por los extremistas vinculados a Al Qaida.