Largas jornadas de trabajo pueden resultar muy estresantes sin tomar las medidas adecuadas que permitan un respiro al trabajador. A veces son pequeños detalles los que pueden hacer una gran diferencia, y así lo comprobó el experto en productividad laboral Jason Jennings, quien descubrió 7 sencillas maneras -que generalmente son vistas como una forma de perder el tiempo- para volver a un empleado mucho más productivo.

Según informó la revista norteamericana Shape, el experto analizó y estudió la forma de trabajo de más de 11 mil directores ejecutivos de importantes empresas y dueños de negocios, entre quienes encontró varios elementos comunes. “Nuestra investigación descubrió que los líderes más exitosos toman frecuentemente varios descansos durante la jornada de trabajo”, explicó el profesional.

Estos son los métodos que el autor descubrió y recomienda:

1. Salir del edificio

Después de permanecer sentado por un largo período de tiempo, es “necesario levantarse y moverse cada cierto tiempo para que la sangre fluya de regreso al cerebro, y así poder concentrarse”, señaló Jennings, quien agrega que la salida no implica desligarse del trabajo. “Muchas de mis mayores ideas -el nombre de un libro o el inicio de un discurso-, han ocurrido mientras estoy haciendo otra cosa, no sentado en mi escritorio centrado en el problema”.

Otros expertos también reconocen que caminar y moverse, aunque sea por poco tiempo, relajan los músculos y reducen la ansiedad, por lo que se recomienda fuertemente hacer una pausa, salir del edificio y tomar un poco de aire ya que hará que los empleados mejoren su humor.

2. Responder en persona

El especialista recomienda dejar de lado las formas de comunicación virtuales, y preferir las respuestas cara a cara. “Cuando interactúas con una persona, puedes ver su expresión facial. Eso hace mucho más fácil la comunicación y colaboración, lo que puede ayudar a resolver el problema más rápidamente”, explicó Cathy Sexton, experta en estrategias de productividad.

De hecho, según Jennings ya son muchas las empresas que están bloqueando los servicios de comunicación virtual, o al menos designando un día a la semana donde no se permite su uso, para privilegiar la comunicación interpersonal y crear un espíritu de colaboración y camaradería en el lugar de trabajo.

3. Escuchar música

Es bastante conocido que la música ayuda a la concentración, pero no sólo hace eso, sino que también ayuda a combatir la falta de motivación.

Según Don Durousseau, neurocientífico cognitivo, la música afecta a cada persona de manera diferente, sin embargo, hay una correlación en la forma en que se puede utilizar para conducir la energía hacia un objetivo que se tiene en mente.

El ritmo de la melodía también influye y puede activar el sistema nervioso, mantenerse alerta y aumentar la motivación.

4. Navegar en Internet

El estudio también demostró que los empleados que contaban con acceso a las redes sociales durante la jornada de trabajo, aumentaban su productividad en un 10%.

“En especial si se trata de una persona extrovertida, las actualizaciones de estado y tweets de las personas pueden proporcionar un impulso de energía, similar a una interacción social en persona”, concuerda Sexton, quien también advierte que basta con 10 minutos en Internet para la distracción, pues de más de ese tiempo, puede arrastrar a un vicio que será perjudicial.

5. Dormir una siesta

Cerrar los ojos por algunos minutos durante la jornada laboral, puede resultar casi impensable para algunos trabajadores, sin embargo, está demostrado que tiene buenos resultados en el desempeño de un empleado. Para el Dr. Michael Breus, psicólogo clínico experto en sueño, basta con una siesta de 20 ó 25 minutos para sentirse mejor anímicamente, sin caer en un sueño profundo, que terminará mareando al trabajador.

Pero si no se cuenta con las comodidades para poder dormir unos minutos, el experto recomienda salir a tomar un poco de aire y sol. “Los rayos del sol estimulan una región del cerebro que detiene la producción de melatonina, por lo que una breve exposición a la luz brillante puede evitar la sensación de cansancio”, explicó el profesional.

6. Organizar el espacio de trabajo

No hay nada mejor que llegar a un lugar de trabajo con un aspecto agradable, aunque sea un espacio pequeño, el orden estimula el ánimo y ayuda a enfocarse en las tareas del empleo.

Jennings descubrió en su estudio que “cada una de sus oficinas -de los 11.000 líderes analizados- compartían algo en común: escritorios transparentes con casi nada en la superficie. Se dieron cuenta de que no hay necesidad de mostrar su importancia con las pilas de papeles o una bandeja de entrada desbordante”.

7. Programar tu día

Hacer una lista con las tareas a realizar al día siguiente antes de irse del trabajo ayuda a comenzar la jornada laboral con una ventaja, a veces de hasta una hora.

Basta con dedicar 15 minutos o menos para hacer la lista, lo que tampoco será muy difícil, considerando que el empleado tiene aún su mente puesta en el trabajo, para ayudar a la productividad de la jornada laboral que viene, lo que ayuda bastante tras un fin de semana.