La presidenta argentina, Cristina Fernández, anunció el viernes que su Gobierno buscará negociar con los fondos especulativos que le reclaman por la deuda en default, pero pidió al juez del caso en Nueva York condiciones equitativas.

“Tenemos el deber y el derecho de ser parte de una negociación justa y equitativa y que nos garanticen la posibilidad de hacer esa negociación”, dijo Kirchner en un acto público por el Día de la Bandera en la ciudad de Rosario, 300 km al norte de Buenos Aires.

Argentina debe negociar contrarreloj una salida que le evite caer en default, luego de que quedara en firme un fallo del juez Thomas Griesa que la obliga a pagar 1.330 millones de dólares a fondos especulativos que rechazaron los canjes de 2005 y 2010, aceptados por casi el 93% de los acreedores con quitas de casi 70% sobre los adeudos.

La nación trasandina está urgida por hallar una salida antes del 30 de junio, fecha en la que debe pagar 900 millones de dólares pactados con el casi 93% de los acreedores. Pero el fallo de Griesa establece un pago en simultáneo a los fondos que litigaron, que representan el 1% de los acreedores, mientras el 7% aún sigue pendiente de acuerdo.

El viernes, no obstante, Griesa resolvió que Buenos Aires deberá pagar su deuda en Estados Unidos, contra una propuesta del ministro de Economía Axel Kicillof.

“La propuesta del Ministerio de Economía (argentino) viola los fallos y procedimientos actuales del Distrito Sureño de Nueva York, y la República Argentina está prohibida de llevar adelante la propuesta”, señaló Griesa en su decisión.

Kicillof afirmó el lunes que su país no se puede permitir que le impidan honrar sus compromisos, por lo que dieron “los pasos para iniciar un canje de deuda para pagarla en Argentina y bajo ley argentina”.

La Mandataria expresó la voluntad de su Gobierno de buscar un acuerdo sobre una deuda impaga desde la moratoria récord declarada en 2001.

“Nosotros queremos cumplir con el 100% de los acreedores, con el 92,4% que accedió a ingresar al canje de 2005 y 2010 y también con los que no lo hicieron. Sólo pedimos que nos generen condiciones de negociación justa”, dijo.

En 2005 y 2010, Argentina llevó a cabo dos canjes de su deuda en mora por unos 100.000 millones de dólares, a los que adhirió casi el 93% de los acreedores.

“He dado instrucciones a nuestro ministro de Economía para que nuestros abogados le soliciten al juez que genere las condiciones para poder llegar a un acuerdo que sea beneficioso e igualitario para el 100% de los acreedores, porque hay normas que cumplir y leyes que respetar aquí y también en el país donde se dictó la sentencia”, dijo Fernández.

Críticas al fallo

El lunes, la mandataria había definido como una “extorsión” el fallo que favorece a los fondos a los que llama “buitres” porque compraron la deuda ya en default, por entender que empujan al país a una nueva moratoria.

Este viernes utilizó un tono más mesurado, aunque tampoco exento de ironía.

“No puedo creer que la legislación de ningún país del mundo diga que hay que reventar (perjudicar) al 92,4% para salvar al 1%. No hay ordenamiento jurídico que pueda justificar eso”, dijo en una crítica al fallo.

El miércoles, el juez Griesa, que en 2012 falló a favor de los fondos que adquirieron bonos argentinos en default y rechazaron los canjes, expresó su desconfianza de que el gobierno argentino honre sus compromisos de la deuda.

“Acá lo que sobra es buena fe y la hemos demostrado haciéndonos cargo de nuestras deudas”, dijo Fernández al recordar que Argentina ha cumplido en tiempo y forma con todos los pagos acordados.

El gobierno argentino había dicho el jueves que era “imposible” pagar en Nueva York tras caer una medida cautelar que dejó en firme la sentencia del juez tras una apelación argentina que fue denegada por la Corte Suprema de EEUU.

“Somos personas capaces de sentarnos a negociar y acordar. Durante mucho tiempo nos corrieron con eso de que no cumplimos nada, pero negociamos en 2005, 2010, luego con el Club de París y luego con el Ciadi. Entonces, ¿quiénes son los que no quieren negociar?”, se preguntó Fernández.

La presidenta hizo alusión a recientes acuerdos con el Club de París para saldar una deuda de 9.700 millones de dólares, y con la petrolera española Repsol que retiró demandas millonarias ante Ciadi (tribunal de resolución de controversias del Banco Mundial), luego de un conflicto desatado por la nacionalización de la petrolera YPF, que era controlada por la firma española.

El gobierno argentino acordó con Repsol un pago en bonos de 5.000 millones de dólares como indemnización.