El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) realizará en abril de 2017 un Censo abreviado, para corregir las deficiencias que tuvo el cuestionado proceso censal de 2012. El Ministro de Economía del gobierno de Sebastián Piñera, Félix de Vicente, criticó la decisión del organismo.
El Gobierno le puso fecha a unos de sus compromisos de campaña: realizar un Censo abreviado para recoger información básica que permita caracterizar a la población, lo que no se pudo realizar durante el cuestionado proceso de 2012, calificado por el gobierno de Sebastián Piñera como “el mejor de la historia”.
Este ejercicio abreviado, es decir, con un cuestionario más acotado, se efectuará durante la tercera semana de abril de 2017, en un solo día, es decir, será un Censo de hecho.
Así lo informó la Directora del Instituto Nacional de Estadísticas, Ximena Clark, quien fue lapidaria al señalar que “el levantamiento de información de 2012, no refleja la realidad demográfica del Chile de hoy”.
Clark subrayó que es necesario el Censo en 2017 para identificar los cambios de composición demográfica y permitir la elaboración de estimaciones y proyecciones de población, además de instalar este ejercicio abreviado, como parte de un proceso permanente de generación de información estadística.
Uno de los principales problemas que tuvo el Censo 2012, según la comisión revisora local, fue su alta tasa de omisión cercana al 9,3%, que se originó en viviendas que no fueron censadas y en otras con moradores ausentes, donde se imputó población a esas casas.
El presidente del grupo de expertos nacionales, el economista David Bravo, destacó positivamente la decisión del INE.
Durante este año y el próximo se preparará el precenso; herramienta que se ejecutará en 2016. En abril de 2017 se realizará el Censo abreviado, cuyos datos serán analizados y difundidos durante ese mismo año.
El ex Ministro de Economía del gobierno de Sebastián Piñera, Félix de Vicente, cuestionó la determinación del INE, afirmando que “no es adecuado ni prudente tomar decisiones por compromisos de campaña”.
Menos crítico fue Pablo Longueira, impulsor junto al ex director del INE, Francisco Labbé, del Censo 2012, quien dijo lamentar lo acontecido con ese proceso y defendió el cambio de un Censo de hecho a uno de derecho.
Ninoska Damianovic, jefa del proyecto Censo, aseguró que los departamentos técnicos del INE, desde hace mucho tiempo, concuerdan en que el organismo técnico debe emigrar desde un Censo de hecho a uno de derecho.
Este proceso, según Damianovic, se debe impulsar con la adecuada planificación, lo que, a su juicio, no ocurrió durante la gestión de Francisco Labbé.
Según informó el INE, durante todas las etapas de planificación y ejecución del Censo abreviado se trabajará con expertos de Celade, el Centro Latinoamericano y Caribeño de Población de la Cepal; con un comité externo, cuyos integrantes se conocerán durante este mes, y con un grupo interno.
Sobre la base de datos del Censo 2012, el INE informó que durante la primera quincena de julio se podrían conocer los resultados de la auditoría interna.
