El desarrollo de las tecnologías ha hecho que cada vez sean más comunes los teletrabajos, es decir, aquellos empleos que se realizan a distancia o modo no presencial.

Esta modalidad ha resultado más cómoda para que algunas personas que pueden trabajar desde su casa, usando Internet y ciertas aplicaciones, además de correo electrónico, videoconferencia y respaldo en “nube”.

“Desde el punto de vista de las empresas, esta práctica contribuye a disminuir de manera importante los costos de infraestructura y desplazamiento, por mencionar algunos. Como sabemos, los arriendos de oficinas en Chile están cada día más elevados, siendo un ítem no menor en los gastos fijos de una compañía. Otro de los beneficios radica en su contribución a un mejor desempeño de los empleados. Mediante este esquema, los individuos al no estar físicamente en la oficina deben ser evaluados en base a los resultados que consigan, por ende, deben ser más productivos”, señala Benjamín Toselli, presidente ejecutivo de la consultora IT Hunter.

Otra de las ventajas del teletrabajo, es que permite a las empresas expandirse en sus operaciones con más facilidad dentro de una región o país y lograr un uso más eficiente de los puestos de trabajo.

“Si miramos ahora los beneficios desde el punto de vista de las personas, podemos mencionar un mayor compromiso de los trabajadores, alta motivación, más movilidad y flexibilidad, más tiempo para estar con la familia y menor estrés, entre otros”, añade Toselli.

Eso sí, para que esta modalidad sea un éxito, según Toselli es importante seguir ciertas claves:

1. Tener un espacio propio: Si bien muchos de los individuos que optan por el teletrabajo lo hacen desde sus casas, es importante contar en éstas con un espacio adecuado en términos de comodidad, luminosidad y privacidad. Por otro lado, la familia del teletrabajador debe entender que éste aunque se encuentre en el hogar no está de vacaciones. Por ende, no debe ser interrumpido en cada momento por temas domésticos.

2. Herramientas TICs: Para que el teletrabajo pueda ser efectivo es fundamental contar con elementos tecnológicos como son un notebook, softwares productivos, correo electrónico, telefonía y conexión a Internet, por ejemplo.

3. Orientación a metas: Lograr los objetivos definidos debe ser el Norte para quien se desempeñe en esta modalidad. Hay que recordar que la evaluación de cada trabajador se hará en base a los resultados que alcance.

4. Sistemático: Asimismo, es importante que sea ordenado y metódico en sus funciones, a lo largo del tiempo. Lo anterior le permitirá adquirir la disciplina y temple requeridos para este tipo de trabajo.

5. Proactividad. Esto significa que la persona debe tener iniciativa propia, ya sea para las tareas que a diario ejecuta como para la toma de decisiones o problemas que deba resolver.

6. Capacidad para administrar su tiempo. El teletrabajo supone una mayor flexibilidad y movilidad. Por ende, la persona debe ser capaz de obtener el mayor provecho de su tiempo, en favor de la productividad. Ideal es contar con un horario de trabajo establecido para ello.

7. Automotivación. Trabajar en un ambiente que no es de oficina, y sin la presencia de colegas ni jefe, puede resultar muchas veces aburrido y poco estimulante. Por ello, es fundamental que la persona tenga su motor propio, que le permita superar aquellos momentos difíciles y alcanzar sus metas.

Asimismo, es fundamental mantener el contacto permanente, ya sea por correo electrónico, teléfono u otro sistema de comunicación.

“Además, es recomendable si se está en la misma ciudad, ir al menos una vez cada semana o máximo cada 15 días a una reunión de coordinación. La pertenencia en ambos sentidos es fundamental. Por otro lado, hay que generar estatus de los avances de las tareas y estar muy compenetrado con los objetivos de la empresa”, indica el especialista.