La empresa Volterra, dueña de los predios que han sido escenario de violentos incidentes con comuneros mapuche en Tirúa, lamentó el último enfrentamiento que dejó 7 carabineros heridos. Insisten en que no pueden continuar las ocupaciones ilegales pero reiteraron su voluntad de diálogo.
Los últimos incidentes se generaron luego que la forestal Volterra decidiera reanudar la cosecha de madera, en el predio Los Canelos de Tranaquepe en Tirúa, el pasado martes, momento en que se levantaron barricadas e incluso se iniciaron varios focos de incendio al interior de los terrenos.
Hubo serios enfrentamientos entre carabineros con los comuneros mapuche que ocupaban el predio exigiendo la reivindicación de las tierras, situación que culminó con siete funcionarios policiales heridos.
Mediante un declaración pública, Volterra catalogó los incidentes como hechos delictuales y recalcó que pese a las conversaciones con las propias comunidades, el alcalde de Tirúa, la Gobernación de Arauco y Conadi, no se logran acuerdos debido a la presión que ejercen algunos personeros, por hacer un traspaso inmediato de las tierras y plantaciones.
En ese sentido, el gobernador Rafael Lama, dijo que es lamentable que exista división entre las propias comunidades para buscar soluciones, lo que quedó en evidencia tras una reunión reciente. Asegura que hay quienes están dispuestos a dialogar mientras que otros exigen medidas en lo inmediato.
Lama fue más lejos y planteó que hay fuertes influencias de grupos violentos, lo que impide avanzar en el diálogo, ya que la empresa tendría disposición de ceder pero por la vía legal.
Desde la forestal aseguran que hay pérdidas millonarias debido a los robos de madera que a la fecha alcanzan los 7 mil 500 metros ruma, situación que las vías judiciales tampoco han podido resolver por lo que acusan impunidad. Recalcaron que las tomas ilegales no pueden continuar y, por lo mismo, reiteraron su voluntad de continuar las conversaciones.
