Tras la muerte de una paciente en el Servicio de Urgencia del Hospital Regional de Concepción, el ministro de Salud Jaime Mañalich y el Jefe de Urgencias del recinto, reconocieron el colapso que hay en el lugar, sobre todo, por la falta de espacio y camas. El secretario de Estado, lamentó el deceso de la mujer y solicitó diligencias para establecer las causas de su fallecimiento.

La muerte de otra persona en el servicio de Urgencias del Hospital Guillermo Grant Benavente representa una nueva muestra del colapso del sistema de salud pública y en particular, de la deficiente atención que el saturado recinto asistencial ofrece a sus pacientes.

El hecho dado a conocer por Radio Bío Bío, dio cuenta de un dramático caso en que una mujer falleció tras una cuestionada asistencia médica. Según sus familiares, Eva Fernández, de 62 años, asmática, tenía fuertes dolores en el pecho y estuvo por más 5 horas en una silla y luego en una camilla en un pasillo del hospital, antes de ser vista por los médicos.

El ministro de Salud Jaime Mañalich, lamentó el deceso de la paciente y reconoció la saturación que existe en el recinto, aunque, rechazó hablar de una negligencia médica. Por ello, pidió al director del hospital que solicitara el permiso para realizar una autopsia y establecer así las causas de la muerte, idea descartada por la familia.

El Jefe de Urgencia, Alfredo Davanzo, entregó la versión del hospital. En contraste con lo denunciado por la familia, el profesional aseguró que la mujer sí fue vista por los especialistas, aunque reconoció que no habían camillas disponibles para ingresarla en el momento en que llegó. Pese a ello, admitió que el panorama no es nuevo, porque la falta de camas es un problema que se arrastra hace tiempo en Concepción.

La paciente falleció producto de una embolia pulmonar masiva a las 20 horas del domingo, acompañada de su hija y no por un especialista. Al menos en ello insistieron sus familiares, y por lo mismo, evalúan iniciar acciones legales contra el hospital, por negligencia médica.