“Endesa ha hecho las cosas como corresponde”, aseguró el presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción, Alberto Miranda. A juicio del dirigente empresarial, sólo le quedaron algunas cosas pendientes en Bocamina II, descartando que la empresa haya actuado de mala fe en su planta de Coronel.

Miranda hizo una cerrada defensa de la generadora en su conflicto que terminó en la justicia, y que la obligó a paralizar sus operaciones por no contar con permiso ambiental en su plan de optimización.

Según el presidente de la CPC local, todo se originó porque Endesa se vio obligada a comprar un generador de 370 megawats puesto que ya no se fabricaban de 350. Y entonces la ley le pedía presentar una declaración de impacto ambiental para hacer los cambios que correspondían. Sin embargo, la Corte Suprema fue de otra opinión, exigiendo un Estudio de Impacto Ambiental.

Alberto Miranda afirma que Endesa ha hecho grandes esfuerzos para mejorar la generación en Coronel, y que ha dado solución a varios conflictos erradicando a mucha gente.

A su juicio y haciendo también un mea culpa, los inversionistas deben mejorar la socialización de sus proyectos, pues el desconocimiento en la gente conlleva muchas veces a un rechazo injustificado.

Con esto coincide Michael Cáceres, uno de los directores de la Cámara de la Producción y el Comercio, quien cree necesario un cambio en la mirada de cómo se diseñan los proyectos, de acuerdo a la nueva realidad.

Según los representantes del empresariado regional, si se desarrollara un mejor trabajo se haría menos conflictiva la actividad industrial, que hoy es demonizada por la comunidad, cuando en realidad resulta vital para nuestro desarrollo y crecimiento.