Cientos de manifestantes ucranianos partidarios de la adhesión a la Unión Europea (UE) continuaban movilizados el lunes en Kiev, pese al frío y las nevadas, un día después de una demostración de fuerza que movió a cientos de miles de personas contra el gobierno.

Poco después del amanecer, entre 200 y 300 personas se habían congregado alrededor del escenario colocado en la Plaza de la Independencia, centro de la contestación, donde algunos sacerdotes recitaban plegarias, señaló un periodista de la AFP.

Bajo una temperatura de -4 grados Celsius y una nevada que cubría el centro de la capital ucraniana, varias decenas de manifestantes adicionales custodiaban la aldea de carpas levantadas tras el escenario y las barricadas colocadas en varios puntos del barrio vecino donde se encuentran los principales edificios del poder político: la presidencia, el Parlamento y la sede del gobierno.

Unas cien personas partidarias del gobierno se habían reunido en un parque situado junto al Parlamento.

El rechazo del presidente Viktor Yanukovich a firmar un acuerdo de asociación con la UE, negociado durante meses, ha sumergido a este país de 46 millones de habitantes en una crisis política sin precedentes desde la Revolución Naranja.

Los europeos acusan a Rusia de haber ejercido presiones económicas y amenazas “inaceptables” sobre Ucrania, que atraviesa una crisis económica y financiera, para que renunciara a la asociación con la UE.