En la previa a su cuarta participación en una Copa del Mundo, la selección de fútbol de Australia aparece en el papel como el integrante más débil del Grupo B del Mundial de Brasil 2014, donde comparte con España, Holanda y Chile.

Los oceánicos clasificaron en el segundo lugar del grupo B de las Eliminatorias de Asia -zona donde participan desde 2006-, tras Japón. En el torneo consiguieron 3 triunfos, 4 empates y 1 derrota, sumando 13 unidades. Vale consignar que este seleccionado presenta la ubicación más baja en el Ranking FIFA entre todos los clasificados a la cita planetaria, ocupando el lugar 59.

La principal novedad de los australianos está en la banca, ya que el técnico que logró la clasificación, el alemán Holger Osiek, fue despedido luego de ser goleado en un par de partidos amistosos y fue reemplazado por Ange Postecoglou, quién será el primer entrenador local que dirigirá a su selección en un Mundial desde 1974.

Los soceroos son un equipo que basa su juego en un estilo físico, influenciado por la habitual participación de muchos de sus jugadores en el fútbol ingles. Llama la atención que sus principales figuras sean jugadores veteranos como el portero de Chelsea, Mark Schwarzer (41 años), el defensa del Sidney FC, Lucas Neill (37) y el jugador del New York Red Bull estadounidense, Tim Cahill (34), lo que habla de un equipo sin mucha renovación.

Cahill es la principal amenaza en ataque, ya que desde su posición de mediocampista ofensivo se transforma en un eficiente atacante, elementos que le permitieron brillar durante largas temporadas en el Everton inglés, donde se transformó en referente para la hinchada.