Como un escenario esperado, calificó la presidenta electa de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Melissa Sepúlveda, el paso de Michelle Bachelet y Evelyn Matthei a la segunda vuelta presidencial, razón por la cual advirtió que el 2014 será un año marcado por las movilizaciones, independiente de cual de las candidatas llegue a La Moneda.
Sin embargo, están conscientes que un eventual triunfo de la presidenciable de la Nueva Mayoría, es el más seguro pronóstico en el balotaje del próximo 15 de diciembre.
Según la presidenta de la FECH, si bien de ganar Bachelet el conglomerado que la apoya tendrá mayoría en ambas cámaras, eso no es prenda de garantía para conseguir los cambios que hace años plantea el movimiento estudiantil, por lo que la movilización se muestra como el único camino para seguir ejerciendo presión.
En esa misma línea, la también electa presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Naschla Aburman, aseguró que no se quedarán esperando a que el futuro gobierno, en caso de ganar Bachelet, cumpla con sus promesas en materia de educación.
Para Moisés Paredes, vocero de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios, de llegar Michelle Bachelet al gobierno se le viene un año complejo.
De acuerdo a los dirigentes estudiantiles, las propuestas en educación planteadas por Bachelet en su programa, no hacen más que acomodar las consignas del movimiento, buscando sólo maquillar el sistema educativo y no realizar los cambios profundos que plantean los estudiantes.
Durante este fin de semana se realizará una nueva reunión de la Confech, donde se comenzarán a delinear las estrategias del movimiento, de cara a la llegada del futuro gobierno.
