El fotógrafo canadiense Ulric Collette (31), conocido por el proyecto “Genetic Portraits”, donde juntaba retratos de personas con algún parentesco para observar su parecido físico, decidió añadir una imagen más a su colección.

A su casi treintena de fotografías fusionadas, agregó una del rostro de su hija Ismaelle (13) emparejado con el de su madre Ginette (62), es decir, la abuela de la niña.

Lo sorprendente es que aunque las separan casi 50 años, tienen rasgos increíblemente similares. Pareciera que estamos viendo la cara de Ismaelle unas décadas más tarde o a Ginette durante su infancia.

“Hablé con un experto en genética este verano y tenía la teoría de que los nietos se parecen mucho más a sus abuelas por el lado paterno”, dijo el artista a Yahoo! Shine.

“Yo quería probarlo, y los resultados son bastante increíbles”, agregó el hombre, señalando que ambas amaron el retrato.

Collette, quien reside en Quebec (Canadá), dice que le gustaría realizar un seguimiento a algunas de sus primeras parejas de fotografiados y ver cómo sus similitudes genéticas visuales cambian a medida que envejecen.

Además, tiene la esperanza de convertir su trabajo en un libro.

Abuela y nieta | Ulric Collette

Abuela y nieta | Ulric Collette

Imagen anterior de Ulrich con su hija

Imagen anterior de Ulrich con su hija