Reclamos injustificados por parte de barristas en estado de ebriedad y desorden dentro de sus locales son algunos de los inconvenientes que deben enfrentar los negocios de barrio cercanos al Estadio CAP en Talcahuano.

Berta Noche lleva más de 40 años atendiendo su local en Las Higueras. Es el sustento para su familia y dice que ella, junto a sus funcionarios, se exponen constantemente cuando hay importantes partidos en el recinto deportivo ubicado a menos de 600 metros de su lugar de trabajo.

Hay resignación en sus palabras, sin embargo está en desacuerdo con la actitud que tienen los afuerinos que llegan hasta el estadio para alentar a sus respectivos equipos.

Los locales comerciales han debido equiparse para hacerle frente a esto que pudiese ser una oportunidad para subir las ventas, pero que, en cambio, sólo le significa malestares y riesgos innecesarios a los comerciantes.

La Ley Seca prohíbe a los locales vender alcohol a menos de 500 metros de los recintos deportivos, situación que favorecería el orden público. Sin embargo, a los negocios como el de Berta Noche no produce más que dificultades al tener que entregar explicaciones a barristas en estado de ebriedad.