La ministra de Educación le quitó el piso al jefe de la División de Educación Superior de la cartera por ranking de notas, luego de criticar el sistema implementado por el Consejo de Rectores. Alberto Vásquez se había mostrado a favor del instrumento, porque ayuda a corregir la distorsión socioeconómica al ingresar a la universidad.

Pareciera ser que la protesta que realizaron hace un par de semanas estudiantes del Instituto Nacional, por la decisión de algunas universidades de elevar el ranking de notas para el proceso de admisión 2014, no sólo se acotó a los incidentes que se registraron en el frontis de la Universidad Católica, sino que su reclamo también hizo eco en la ministra de Educación, Carolina Schmidt, quien en los últimos días ha criticado el sistema implementado por el Consejo de Rectores, aduciendo que este perjudica a los estudiantes de colegios emblemáticos.

De esta forma, la ministra Schmidt, entró de lleno en la discusión, quitando a la vez el piso al jefe de la División de Educación Superior de la cartera, Alberto Vásquez, quien el 12 de septiembre pasado valoraba la iniciativa.

El vicepresidente Ejecutivo del Consejo de Rectores, Juan Manuel Zolezzi, lamentó el cambio de opinión que ha tenido la ministra sobre este punto, sobre todo, porque esta modalidad beneficiaría a aquellos estudiantes más vulnerables, que de otra manera no tendrían cómo ingresar a la universidad.

Al igual como en otras materias de educación, la opinión de la ministra Schmidt, no genera consenso ni apoyo en los demás actores. El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Diego Vela, aseguró que el ranking también es una buena fórmula para disminuir las tasas de deserción.

Si bien el Consejo de Rectores viene anunciando hace varios años la inclusión del ranking de notas, como requisito para ingresar a la universidad, fijando sólo un piso mínimo de un 10 por ciento, lo más probable es que el tema sea tratado en la reunión que el próximo jueves sostendrá el Cruch, en la Universidad de Chile.