Después de que el senador UDI Hernán Larraín pidiera perdón por sus actos u omisiones durante la dictadura cívico-militar, surgieron voces en la derecha para exigir igual gesto a la izquierda por el gobierno de Salvador Allende que -desde su perspectiva- fue la causa del golpe de estado.
Sin embargo, dirigentes de ese sector que hoy integran el pacto Nueva Mayoría, coincidieron en que esa autocrítica ya la hicieron y, profusamente, en las últimas cuatro décadas.
El secretario general del Partido Socialista, Francisco Javier Díaz, opinó que se trata de un emplazamiento absurdo porque -argumentó- hay vasta literatura de intelectuales y políticos de izquierda que, tras el golpe militar, hicieron un análisis crítico de la Unidad Popular.
El secretario general del Partido Comunista, Lautaro Carmona, aseguró que la izquierda ha reconocido los errores cometidos durante el gobierno de la Unidad Popular y cuestionó que la derecha intente empatar lo ocurrido en ese período con el quiebre constitucional que propiciaron las Fuerzas Armadas.
Para el presidente del Movimiento Amplio Social, el senador Alejandro Navarro, la izquierda que hoy está en el pacto Nueva Mayoría hizo una profunda autocrítica de su proyecto político, a partir del golpe militar.
Sí reconoció que falta que algunos en su sector también asuman responsabilidades que se han endosado a algunos dirigentes en específico, como el ex secretario general del Partido Socialista, Carlos Altamirano.
El senador Navarro agregó que Altamirano ha terminado pagando por todos. El ex dirigente socialista, quien defendió las posturas más radicales durante la UP, encabezaba el PS al momento del derrocamiento de Salvador Allende y, después del golpe, voluntariamente pasó a un verdadero ostracismo político.
