La mayoría republicana en la Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos aprobó este jueves una enmienda que facilita la expulsión de los hijos de inmigrantes nacidos en el país pero sin documentos, llamados “dreamers”, que fue rechazada por la Casa Blanca.

La enmienda, introducida por el congresista republicano Steve King, elimina los fondos para ejecutar instrucciones del gobierno del presidente Barack Obama que relajaban la implementación de la ley migratoria y hacían más difíciles las deportaciones.

Las instrucciones gubernamentales, emitidas en 2011, ordenan a los agentes migratorios abstenerse de expulsar a indocumentados con lazos familiares, educativos o militares en Estados Unidos o revisar con detenimiento casos de testigos o víctimas de crímenes.

Aprobada con 224 votos a favor, principalmente republicanos, y 201 en contra, la enmienda está incluida en un proyecto de ley que discute la cámara sobre el presupuesto del Departamento de Seguridad Interior.

La Casa Blanca reaccionó enseguida rechazando la propuesta y calificándola de “contraria a los valores y principios” estadounidenses.

“Los ‘dreamers’ son miembros productivos de nuestra sociedad, fueron traídos a este país siendo niños, se criaron en nuestras comunidades y son estadounidenses en todos los sentidos a pesar de carecer de documentos”, señaló el gobierno en un comunicado.

Según el texto, la enmienda “es contraria a los valores y principios de nuestro país. Le pide a los agentes de cumplimiento del orden que trate a los ‘dreamers’ de la misma manera a la que tratarían a los criminales violentos”.

Al respecto, el jefe de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, ya anunció que esa propuesta sera rechazada en la cámara alta.

La decisión coincide con el voto esperado en el pleno del Senado en los próximos días sobre un proyecto de reforma migratoria, que incluye una vía para la ciudadanía de 11 millones de indocumentados.