El comunero Ramón Llanquileo depuso la huelga de hambre que había comenzado tras su captura hace dos semanas, luego de quebrantar el beneficio de la salida de fin de semana.

La decisión la tomó el comunero, no obstante Gendarmería mantuvo la decisión de dejarlo en el mismo módulo que se encuentra actualmente, separado de otros miembros de la CAM, situación que será revisada por la justicia este viernes.

Junto con terminar los 10 días de castigo, en los que tuvo prohibida la visita de familiares, el comunero mapuche Ramón Llanquileo puso fin a la huelga de hambre iniciada en protesta por la decisión de Gendarmería de mantenerlo alejado de otros líderes de la Coordinadora Arauco Malleco.

Así lo confirmó el jefe de estudios de la Defensoría Penal Pública, Pelayo Vial, al explicar los motivos que tuvo su cliente para tomar la decisión.

La esperanza del abogado es que al término de la huelga se sume una orden judicial para que Llanquileo sea definitivamente trasladado desde el penal Bío Bío a la cárcel El Manzano, junto a otros comuneros como Héctor Llaitul.

La Defensoría así lo pidió al Juzgado de Garantía de Cañete, donde se evaluará una cautelar de garantía con ese objetivo, adelantó Pelayo Vial.

Llanquileo cumple una condena por su participación en el ataque al fiscal Mario Elgueta en 2008. Había recibido el beneficio de la libertad de fin de semana. Sin embargo, el mes pasado, el comunero no regresó a la cárcel de Lebu, decretándose una orden de captura.