El gobierno brasileño, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y el club Palmeiras de Sao Paulo repudiaron el jueves la agresión de hinchas contra jugadores del club en Buenos Aires, a exactos 100 días de la Copa de las Confederaciones en Brasil.

Un grupo de hinchas del Palmeiras agredió a jugadores del plantel este jueves en el Aeroparque cuando estaban a punto de embarcar un avión, tras la derrota 1-0 frente al argentino Tigre en la Copa Libertadores.

El portero Fernando Prass fue herido y recibió tres puntos en la cabeza, indicó el club en un comunicado.

En presencia del secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, que realiza una gira por Brasil, el ministro brasileño de Deportes, Aldo Rebelo, dijo que el episodio “además de lamentable, no se puede repetir”.

“Los clubes, los jugadores no pueden estar sometidos a ese tipo de violencia. La policía y el sistema judicial deben tomar medidas para castigar a los responsables”, afirmó el ministro en una conferencia de prensa.

El presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y del Comité Organizador Local (COL) de la Copa del Mundo, José Maria Marin, expresó también su indignación.

“Tuvimos el episodio en Bolivia e infelizmente conocemos ahora esta otra tragedia. Esto no puede quedar impune”, expresó.

En febrero, un boliviano de 14 años murió en un partido de la Libertadores en la ciudad de Oruro al ser alcanzado por una bengala arrojada desde la hinchada de Corinthians, que junto con Palmeiras, es una de las ‘torcidas organizadas’ más violentas de Brasil.

Son “bandidos irracionales y no hinchas apasionados quienes participaron de esta salvajada”, zanjó por su lado el presidente del Palmeiras, Paulo Nobre, en un comunicado.

Brasil se prepara para recibir este año y el próximo a millones de aficionados que disfrutarán de la Copa de las Confederaciones, en junio próximo, y el Mundial-2014.