A tres años de ocurrido el terremoto del 27-F, las evaluaciones en materia de reconstrucción son dispares, y especialmente cuando se trata de hablar de la realidad del mundo rural. En ese sentido, la postura del diputado (DC) Pablo Lorenzini es clara y sin dobles lecturas, y es que a su juicio, el cataclismo del 2010 sólo vino a corroborar una cruda realidad que enfrenta la región del Maule.

“El Gobierno saca cuentas alegres en materia de reconstrucción, pero en eso hay que saber diferenciar entre lo que ocurre en la ciudad y lo que sucede en la periferia. Históricamente las políticas de estado no llegan al campo, y ahora no ha sido la excepción, ya que el terremoto sólo vino a confirmar el abandono que existe hacia el mundo rural”, comentó.

En esa línea, Lorenzini emplazó al presidente Piñera a recorrer aquellas localidades más alejadas y que a todas luces presentan un lento avance en reconstrucción, especialmente en lo habitacional.

“Es fácil visitar aquellas comunas donde la empresa privada y las constructoras han hecho el trabajo, pero sería mucho más meritorio ir donde aquellas familias que hace más de un año tiene sus subsidios habitacionales y a la fecha no han visto un ladrillo en pie”, dijo.

Para el legislador, lo anterior da cuenta de una inoperancia del gobierno en el sentido de no brindar las condiciones para que las constructoras se interesen por construir en sectores menos poblados y alejados de los centros urbanos; pero además da cuenta del nulo aporte social del privado.

“Es válido que las empresas quieran hacer sus negocios y reportar grandes utilidades, porque es un hecho que ellos estarán donde hay plata segura; pero es aquí donde también ha fallado el Gobierno, en cuanto a no generar instrumentos o herramientas que hagan atractivo su arribo a las zonas rurales”, puntualizó Lorenzini.