El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, acusó a Colombia de desconocer y convertir el fallo limítrofe de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya en un tema de campaña electoral en su país, en vez de “acatarlo” y buscar un acuerdo con Managua para regular la pesca en los espacios adjudicadas en el mar Caribe.

Colombia “se ha empeñado en convertir el tema de la Corte en un tema electoral, de política interna en lugar de acatarlos”, cuestionó Ortega durante la conmemoración del 79 aniversario del asesinato del héroe antiimperialista, Augusto César Sandino, en la plaza de la Revolución en Managua.

Denunció que algunos políticos colombianos han llegado incluso “a plantear que si ellos ganan la presidencia van desobedecer el fallo y va a llenar con sus fuerzas navales y aéreas” los espacios que la CIJ le asignó a Nicaragua en el Caribe, un abierto “desafío al derecho internacional”.

Ortega consideró que las imputaciones de que la “naval de Nicaragua estaba hostigando y no estaba permitiendo pescar a los pescadores de las raizales” de la isla colombiana de San Andrés forma parte de la “campaña mediática feroz” que hay en Colombia contra su país, que alimenta a su vez “el chovinismo”.

“El presidente Manuel Santos y el pueblo colombiano saben que la solución al fallo de la Corte no es el uso de la fuerza, ni el desplazamiento de naves de guerra ahí en la zona”, sino “trabajar en un acuerdo entre Nicaragua y Colombia para que podamos regular” la pesca y aplicar el fallo, indicó.

En esa dirección, el gobernante pidió a las “modestas” lanchas de la fuerza naval nicaragüenses que resguardan las zonas marítimas, que ahora están bajo su dominio, actuar “con firmeza” pero “con serenidad”.

La naval debe “siempre privilegiar la comunicación con las fuerzas (colombianas que se) desplazan en esos territorios” porque “hay intereses poderosos en provocar una confrontación entre Colombia y Nicaragua”, advirtió.

Ortega reiteró, además, que su gobierno no prohibirá a los pescadores de los raizales faenar en sus aguas y que su gobierno analiza abrir un consulado en San Andrés para facilitar la comunicación y asegurar que las embarcaciones no sean usadas para operaciones del narcotráfico.

La CIJ resolvió en noviembre pasado una disputa territorial entre ambos países en la que determinó que el archipiélago de San Andrés y todas las islas, y cayos adyacentes son de Colombia y trazó una nueva delimitación marítima que otorga a Nicaragua mayor soberanía en el Caribe. Colombia desconoció el fallo.