Decenas de campesinos panameños opuestos a la construcción de hidroeléctricas en sus territorios por parte del gobierno, volvieron a enfrentarse con la Policía por segundo día consecutivo.

Los enfrentamientos ocurrieron en la provincia de Veraguas (suroeste), en la zona conocida como La Soledad, en el distrito de San Francisco.

Los manifestantes trataron de cortar el tráfico con barricadas de neumáticos ardiendo y troncos en la carretera que une Santiago y Santa Fe, por lo que los policías intervinieron.

“Nos han echado gases lacrimógenos y otra clase de productos para dispersar a los compañeros. Hoy (la Policía) está sirviéndole a los empresarios, a las grandes transacionales y están reprimiendo al pueblo por el simple hecho que está reclamando”, denunció un manifestante al canal Telemetro.

Por su parte el alcalde de San Francisco, Bernardino Borbúa, cuestionó la actuación policial.

El miércoles indígenas y campesinos también habían chocado con la policía durante protestas de rechazo a proyectos hidroeléctricos que aseguran dañan sus comunidades.

Los principales enfrentamientos se registraron en La Mesa, Veraguas, donde las autoridades reprimieron con gases lacrimógenos a decenas de manifestantes que cerraron la vía Interamericana sobre el puente del río San Pablo, donde se situaría el proyecto.

El gobierno de Ricardo Martinelli defiende la construcción de hidroeléctricas, aprovechando la potencialidad hidrográfica del país con el fin de abaratar el costo de la energía.

“Si nosotros no aprovechamos responsablemente los recursos hidroeléctricos estamos condenando a las futuras generaciones a vivir y depender del precio del petróleo”, alegó el miércoles el ministro de Gobierno, Jorge Ricardo Fábrega.