La oposición venezolana alertó en una carta divulgada el martes al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, de una posible “violación al orden constitucional” si el gobierno continúa en funciones después del 10 de enero, fecha prevista para la asunción de Hugo Chávez, en plena polémica constitucional en el país por la posible ausencia ese día del mandatario.

“Si para el 10 de enero no se produce la juramentación (sic) del Presidente y no se activan las disposiciones constitucionales relacionadas con la falta temporal del Presidente de la República, se habrá consumado una grave violación al orden constitucional en Venezuela”, afirma la misiva enviada el lunes por la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

La Carta Magna establece que el presidente debe tomar posesión el 10 de enero ante la Asamblea Nacional y que ante una situación “sobrevenida” puede hacerlo ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), sin fijar fecha.

La MUD insistió en la carta a la Organización de Estados Americanos (OEA) en que se declare la “falta temporal” de Chávez, que el 11 de diciembre se sometió a su cuarta cirugía contra el cáncer en La Habana, y que en su lugar asuma temporalmente la jefatura del Estado el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, opción que es contestada por el oficialismo venezolano.

Además, la coalición opositora rechaza que el gobierno permanezca en funciones porque el día 10 termina el actual periodo constitucional y empieza el nuevo, y esgrime que “en ningún caso cabe una interpretación que permita dejar sine die la fecha del acto” de posesión.

Se espera que en las próximas horas el líder opositor Henrique Capriles Radonski, derrotado por Chávez el pasado 7 de octubre, se pronuncie sobre el tema en rueda de prensa.

El gobierno sostiene que Chávez, de 58 años y en el poder desde 1999, puede tomar posesión de su nuevo mandato cuando esté en condiciones ante el TSJ, que la fecha del 10 de enero es un “formalismo” y que el gabinete puede seguir en funciones hasta que se realice la toma de posesión.

“Nada puede vulnerar la soberanía popular”, dijo este martes el dirigente del PSUV y exvicepresidente, Elías Jaua, en alusión a la reelección de Chávez.

La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) se sumó el lunes a las críticas y tachó de “moralmente inaceptable” alterar la Constitución para “alcanzar un objetivo político”. Este martes, la CEV volverá a pronunciarse.

A dos días de la supuesta toma de posesión, parece poco probable que Chávez pueda estar presente. Según el último reporte médico difundido la noche del lunes por el gobierno, el mandatario se “encuentra en una situación estacionaria” tras la insuficiencia respiratoria que sufrió por una severa infección pulmonar debido a la cirugía.

Este lunes, Cabello, número dos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), se negó a precisar si el mandatario, estará de regreso ese día. “Nosotros no descartamos absolutamente nada”, aseguró.

A la vez, convocó a “una gran concentración en Caracas el día 10 de enero frente al palacio de Miraflores (sede del ejecutivo), apoyando a nuestro presidente de manera contundente”.

A ella acudirán, según él, varios jefes de Estado de “países amigos”. Los presidentes de Uruguay, José Mujica, y de Bolivia, Evo Morales, han confirmado su presencia en Caracas en esa fecha, así como el canciller ecuatoriano Ricardo Patiño.

Este martes se cumple un mes exacto desde que Chávez, reelecto por amplio margen en octubre, anunció que sufría una nueva recaída del cáncer, cuya ubicación y gravedad se desconocen.

Desde que partió a La Habana, los venezolanos no han visto imágenes ni han escuchado a un presidente que durante 14 años fue una presencia casi cotidiana en la pantalla de sus televisores.