Un alto responsable de la ONU denunció este sábado en Abiyán varios casos de torturas y detenciones arbitarias en Costa de Marfil, donde el ejército está acusado de haber cometido numerosos abusos al reprimir una ola de ataques.

“No cabe duda de que ha habido casos de detenciones arbitrarias, que hay gente que ha desaparecido, que incluso hay personas víctimas de tortura”, declaró en una rueda de prensa Ivan Simonovic, subsecretario general de las Naciones Unidas encargado de los derechos humanos.

Los periodistas lo habían interrogado acerca de los recientes informes de ONG internacionales que acusan a las fuerzas armadas de haber cometido desmanes masivos en los últimos meses.

El gobierno de Costa de Marfil está bajo fuerte presión en el terreno de los derechos humanos, sobre todo con respecto a la reacción del ejército a una serie de ataques perpetrados contra las fuerzas de seguridad entre agosto y septiembre.

Las ONG Amnistía Internacional y Human Rights Watch acusaron a las fuerzas militares marfileñas de masivos abusos, detenciones arbitrarias y casos de tortura.

Después de haberlo negado, el gobierno admitió posibles “deslices”, y luego reconoció “maltratos”, pero solo en los casos de detenciones de hombres armados. El poder ha imputado los recientes ataques armados a partidarios de Laurent Gbagbo, acusaciones rechazadas por el campo del ex presidente, derrocado al final de la crisis de diciembre 2010-abril 2011, que causó aproximadamente 3.000 muertos.