La tasa de desocupación del trimestre julio-septiembre se ubicó en 6,5%, variando 0,1 puntos porcentuales respecto del trimestre móvil anterior y disminuyendo 0,9% en doce meses. La Fuerza de Trabajo y los Ocupados registraron mayores variaciones anuales (0,6% y 1,6%, respectivamente), comparadas con las del período anterior.

A su vez, los Inactivos o personas fuera de la Fuerza de trabajo se incrementaron en menor magnitud, contrastando con la tendencia creciente de los períodos previos. Esto último, debido a que los Inactivos potencialmente activos anotaron una mayor disminución que amortiguó el aumento de Inactivos habituales. La mayor incidencia en el impulso anual del empleo provino de mujeres, en las que se acentuó el incremento de Asalariadas.

Esta última categoría concentró el aumento del empleo total, consignando un mayor incremento anual respecto del período anterior, mientras que Cuenta Propia continuó disminuyendo, pero en una menor magnitud, debido al aumento en mujeres que revirtió la senda de variaciones negativas de los últimos períodos.

Los sectores de mayor incidencia en el incremento anual de la ocupación fueron Enseñanza; Minería, y Hoteles y Restaurantes. Mientras que la principal disminución continuó registrándose en Comercio. Respecto del trimestre móvil anterior, la Fuerza de Trabajo y los Ocupados reflejaron un mayor dinamismo, acorde con la estacionalidad del período. El empleo en Agricultura consignó su segundo aumento consecutivo, seguido de Industria Manufacturera y Enseñanza.

Según horas habitualmente trabajadas, se acentuó el incremento anual de los Ocupados que trabajan 45 horas a la semana, mientras que aquellos que se desempeñan en empleos de pocas horas o a tiempo parcial continuaron disminuyendo, pero en menor magnitud respecto de lo observado en los períodos anteriores.