Lograr un puesto de ventas en el sector de los cementerios de Los Ángeles durante el fin de semana largo de Todos los Difuntos, se ha convertido en una odisea para decenas de vendedores que aprovechan esos días para ofrecer todo tipo de artículos y productos.

Ya desde la tarde del domingo, los comerciantes se instalaron en las afueras de la municipalidad de Los Ángeles para hacer fila y lograr uno de los 400 cupos dispuestos por la corporación edilicia para ubicarse a lo largo de la avenidas Gabriela Mistral y la prolongación del camino a San Antonio.

La idea de los comerciantes es aprovechar la masiva afluencia de personas que visitan las tumbas de sus seres queridos en los cementerios general y católico, que distan 400 metros uno del otro.

Una vendedora de avanzada edad relató a Radio Bío Bío que estuvo el domingo desde las 22:00 horas esperando su turno en el primer piso de la municipalidad.

Otra comerciante reclamó que debieron esperar toda la noche, con lluvia y frío, en las afueras del municipio para sacar la autorización de trabajo.

En la Oficina de Rentas y Patentes de la Municipalidad de Los Ángeles se confirmó que para este año se otorgarán 400 permisos a los comerciantes ambulantes, acción que se ha coordinado con el Servicio de Impuestos Internos para el cobro de los respectivos derechos.

Aunque reconocieron que es habitual la aglomeración de comerciantes en los días previos a ese tipo de festejos, se hizo ver que los propios interesados se organizaron para controlar la situación y asignar los cupos por orden de llegada.