Desde aproximadamente un mes que ocho reos imputados del módulo N°4 de la cárcel de Osorno decidieron comenzar una huelga de hambre. Seis de ellos permanecen en huelga líquida y dos mantienen la medida de presión de forma seca.

La madre de uno de los reos, sostuvo que los jóvenes decidieron iniciar la huelga ya que la Fiscalía de Osorno no revisa las causas por las que se mantienen en prisión, la mayoría de ellos por robo.

Los imputados aseguran que están dispuestos a llevar la huelga de hambre hasta las últimas consecuencias si no son escuchados por la Fiscalía.

Al respecto el alcaide del penal, mayor Pedro Sanhueza, aseguró que los imputados están siendo atendidos en la enfermería de la cárcel para que se mantengan en buen estado de salud.

Recordemos que, incluso, uno de los huelguistas se tragó una cuchara para conseguir ser escuchado. El reo fue llevado hasta el hospital donde se le realizó una radiografía, corroborándose que ésta se encontraba en su organismo.