La sala penal de la Corte Suprema, en forma unánime, anuló el dictamen del Tribunal Oral de Viña del Mar que el 10 de julio pasado absolvió a Pablo Aravena Gárces, acusado de un triple homicidio en el sector de Peñablanca.

En la oportunidad, los jueces consideraron que no se expusieron evidencias para responsabilizar al imputado, quien tuvo la coartada que la noche de crimen, el 1 de diciembre de 2008, se encontraba cumpliendo condena de reclusión nocturna por delitos de hurto y asalto en Limache.

Las víctimas son Viveca Segovia Montenegro (55, su madrastra), que fue encontrada ahorcada y atada de pies y manos, al igual que su hijo Felipe Aravena Segovia (17) y la empleada doméstica, Victoria Donoso (40).

La policía no encontró huellas en la casa donde se perpetró el crimen en Villa del Carmen de Peñablanca. Las sospechas sobre Aravena recayeron por sus antecedentes penales y porque mantenía una disputa con su madrastra, Viveca Segovia, por una herencia.

La investigación se prolongó por tres años y el juicio duró 20 días, donde se expusieron sólo 12 pruebas.

El abogado de los familiares de las víctimas, Juan Carlos Manríquez, se mostró muy satisfecho, argumentando que la Corte Suprema defendió el dolor de los familiares.

En tanto, el abogado del Ministerio Público, Hernán Ferrada, resaltó que insistirán con estas pruebas de contexto condenar al imputado.

El imputado se encuentra en libertad, por lo que la Fiscalía solicitará nuevamente su prisión preventiva.