Ad portas de los 520 años de la llegada del conquistador español a suelo americano, dirigentes indígenas de la provincia de Bío Bío coincidieron en lamentar la fecha, haciendo ver que el Estado chileno aún tiene compromisos pendientes con los pueblos originarios.

Fue el caso de Eduardo Cáceres Quintremán, vocero de las familias pehuenche que mantuvieron hasta el final su oposición a la construcción de la central Ralco.

Según el dirigente, no hay absolutamente nada que celebrar, principalmente porque el Estado no ha dado respuesta a los requerimientos de los indígenas.

Por su parte, el lonko moluche Adán Carimán, se quejó que aún no se avanza en el reconocimiento de los pueblos originarios.

Según los dirigentes, este 12 de octubre es una instancia para que los pueblos originarios puedan reflexionar en torno a la preservación de sus costumbres y tradiciones y también consensúen esfuerzos para lograr el reconocimiento de sus derechos históricos.