El presidente de Paraguay, Federico Franco, posiciona a su partido Liberal para las elecciones de 2013 agitando la bandera de la soberanía ante la actitud de Argentina y Brasil, sus poderosos vecinos que desconocen la legitimidad de su gobierno, señalaron analistas a la AFP.

“Esta decisión no tiene retroceso. Somos dueños del 50% de la energía en Itaipú y Yacyretá”, dijo Franco este viernes en conferencia de prensa, en alusión a su anuncio de que Paraguay utilizará la mitad de la energía que le corresponde de las represas binacionales sobre el río Paraná, la primera con Brasil y la segunda con Argentina.

“No vamos a usar nuestras 10 turbinas en Itaipú de la noche a la mañana pero vamos a prepararnos para convertir a Paraguay en un polo de desarrollo”, dijo el presidente, con el nuevo tono nacionalista de sus discursos, después de que reemplazara el 22 de junio pasado al destituido presidente Fernando Lugo.

Si bien algunos expertos consideran que Paraguay está reflexionando sobre su estrategia de desarrollo tras el marginamiento a que Brasilia y Buenos Aires sometieron al gobierno Franco, un ex administrador paraguayo de Itaipú denunció tratativas del actual gobierno con la multinacional Rio Tinto Alcan y calificó de “seudo- nacionalista” al discurso del presidente.

“Esta coyuntura de manoseo y marginamiento de Argentina y Brasil no se vio desde la Guerra de la Triple Alianza (1864/70), a pesar de ser los principales beneficiados por las dos gigantescas represas que comparten con nosotros”, dijo a la AFP el ex canciller Carlos Mateo Balmelli, próximo al Partido Liberal.

“Esta situación nos hace reflexionar como nunca lo hemos hecho, sobre nuevas políticas y estrategias que nos sacuda de este secular subdesarrollo”, agregó.

El miércoles pasado, Franco declaró: “¿Cuándo nos van respetar Brasil y Argentina? El día en que el gobierno (paraguayo) les diga: ‘permiso, vamos a usar nuestra energía. Paraguay cambió su posición. No va a ceder más su energía. La usaremos en la industria’”, enfatizó el mandatario durante un acto en Asunción en alusión a las ventas a sus vecinos de gran parte de la energía generada por esas represas.

Mateo, un diplomático que durante casi dos años fue director de la represa hidroeléctrica paraguayo-brasileña Itaipú bajo Lugo (2008/2012), dijo concordar con Franco sobre la necesidad de fijar una política que termine con la cesión de la energía eléctrica “a precio regalado”, tanto en Itaipú como en Yacyretá.

“A partir de ahora, Paraguay tiene que pensar en una política exterior fuera del Mercosur y no más dentro del Mercosur”, expresó el diplomático.

“Esa impresionante cantidad de energía excedente que tenemos, hay que volcarla a estimular la instalación de industrias para apuntalar el desarrollo”, señaló Mateo.

Para el abogado internacionalista Aarón Ruiz Díaz, el presidente Franco, con el poco tiempo de gobierno que tiene, “debe impulsar la creación de una comisión multipartidaria, técnica y legal para diseñar una política exterior de todo tiempo, como Itamaratí, que prevea estas contingencias”, como su marginamiento del Mercosur.

En opinión de Gustavo Codas, ex director de Itaipú, sustituto de Mateo en la dirección de la represa en la era Lugo, las declaraciones de Franco constituyen “un intento de justificar las negociaciones con la compañía de aluminio Rio Tinto Alcan, para entregarle dos turbinas de Itaipú por 20 o 30 años a precio irrisorio”.

Estrecho allegado del ex presidente Lugo, Codas dijo que la gigantesca electrointensiva multinacional, desea abandonar Brasil “porque le quieren cobrar la energía a precio de mercado”.

“En realidad, Franco recurre a un discurso seudo-nacionalista para tapar lo que realmente está ocurriendo. Es muy sospechoso que lleguen a un acuerdo, una empresa muy cuestionada en Brasil y un gobierno surgido de un golpe”, enfatizó.

“Franco no va a poder hacer nada. En Paraguay no hay red eléctrica. No tiene infraestructura ni los recursos para hacerlo. Es un discurso para aparecer ante el público como nacionalista”, puntualizó.