El ex ministro de Relaciones Exteriores de Argelia, Lakhdar Brahimi, de 78 años, se perfila para ser designado como nuevo enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria en sustitución de Kofi Annan, informaron este jueves fuentes diplomáticas.

El nombramiento podría ser anunciado oficialmente a principios de la próxima semana, de acuerdo con las mismas fuentes, que pidieron el anonimato ya que las negociaciones todavía no han concluido.

“Es la decisión del secretario general (de la ONU, Ban Ki-moon), y su nominación será anunciada si es que no decide renunciar” a esa misión, dijo un diplomático de la ONU.

Brahimi, ministro argelino de Relaciones Exteriores de 1991 a 1993, fue el enviado especial de la ONU para Afganistán de 1997 a 1999, así como de 2001 a 2004 tras la caída de los talibanes. También fue el enviado de Naciones Unidos para Irak en 2003.

En 2005 se jubiló, pero cuatro años después aceptó dirigir un grupo de expertos independientes para dar consejos sobre el manejo de la seguridad del personal de la ONU en el mundo.

Brahimi también forma parte del grupo “The Elders” (“Los Ancianos”) que media en conflictos, junto con personalidades como el héroe contra el apartheid Nelson Mandela, el expresidente de Estados Unidos Jimmy Carter o el ex primer ministro finlandés y Nobel de la Paz Martti Ahtisaari.

Annan anunció el 3 de agosto que dejará su cargo como emisario para Siria cuando termine el mes, ya que no recibió “todos los apoyos que merecía” la causa. “Hay divisiones en la comunidad internacional”, afirmó entonces.

El ex secretario general de la ONU, que fue designado el 23 de febrero a su misión en Siria, diseñó un plan de paz de seis puntos -que incluía un cese de los combates y una transición política- que no llegó a aplicarse nunca.

Un diplomático de la ONU asguró el jueves bajo el anonimato que el Consejo de Seguridad podría modificar este plan.

“Por el momento es todo lo que tenemos, pero eso no quiere decir que no pueda ser reexaminado. Hay elementos que son superfuos, podría haber una nueva versión”, dijo.

La Misión de la ONU en Siria (MISNUS), desplegada en abril, tuvo que suspender a mediados de junio sus operaciones por la virulencia de los combates y redujo a la mitad (150) sus efectivos.

El Consejo de Seguridad prolongó su mandato hasta el 19 de agosto, pero advirtió que sus observadores partirían si las condiciones de seguridad y las perspectivas de diálogo político entre el gobierno y la oposición no mejoraban significativvamente.

De ser nombrado, Brahimi asumiría la misión en Siria en momentos en que los rebeldes anunciaron su retirada de su bastión de Salahedin, en Alepo -la segunda ciudad de Siria y su capital económica- debido a los violentos bombardeos de las fuerzas del régimen.

Según datos de la ONU, al menos 20.000 personas han perdido la vida desde que comenzó la sublevación popular contra el régimen de Bashar al Asad en marzo de 2007.