La Concertación manifestó su voluntad de dialogar con el Gobierno sobre una agenda con el sistema binominal como tema central.

En el plano interno, el bloque opositor ratificó su deseo de ampliarse a otras fuerzas para crear una nueva mayoría de gobierno. Sin embargo, esto último tuvo dispares interpretaciones por parte de dirigentes de la Democracia Cristiana y el PPD.

Por cerca de tres horas y media se extendió el encuentro que convocó a dirigentes y parlamentarios de la Concertación para analizar el eventual diálogo con el gobierno y el futuro del conglomerado.

El largo e intenso debate se resumió en una declaración leída por el presidente del Senado, Camilo Escalona, quien -sobre el primer punto- declaró la voluntad de llevar adelante conversaciones con La Moneda, aunque -aceptando la demanda inicial del PPD- supeditada a una agenda que incluya, como eje central el sistema electoral, además de otras reformas de interés ciudadano.

El propio Escalona y los jefes de las bancadas parlamentarias de la Concertación fueron mandatados para explorar el diálogo con el gobierno.

Sobre el interlocutor, si bien el Senador socialista dijo que es tarea del Ejecutivo designarlo, el deseo bastante extendido entre los asistentes al encuentro fue que las conversaciones se hicieran con el comité político y no exclusivamemte con el Ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter.

Esto lo dejó claro el presidente del PPD, Jaime Quintana, quien posteriormente publicó en su cuenta de Twitter: “La Concertación hoy no avaló transformar a Hinzpeter en el Santo Patrono el diálogo”.

Asistentes a la cita manifestaron a La Radio que ahora la iniciativa debe tomarla el Gobierno y algunos creen que, dado que el tema no concita acuerdo en el oficialismo, las gestiones abortarán prontamente. Pero en ese escenario, dicen, la responsabilidad recaería en La Moneda y, de paso, Camilo Escalona zafaría de un diálogo que varios creen que no tiene futuro.

Sobre los problemas internos del bloque opositor, la declaración ratifica el acuerdo del 5 de octubre del año pasado, en orden a actuar como una alianza de centro-izquierda y conformar una nueva mayoría social y política para ser una real alternativa de Gobierno.

Esto tuvo dos lecturas distintas a la salida de la reunión y que hacen pensar que siguen las diferencias en las visiones sobre el futuro del bloque.

El presidente de la Democracia Cristiana, Ignacio Walker, sentenció dos veces que “hay Concertación para rato”, aunque abriéndola a otros sectores.

En tanto, el presidente del PPD, Jaime Quintana, aseguró que con la ratificación del acuerdo del 5 de octubre del año pasado la Concertación comienza a cerrar un ciclo y en plazo acotado, pues para las elecciones parlamentarias y presidencial del 2013 se presentará en un nuevo formato con apertura hacia organizaciones sociales y de izquierda. Reiteró que habrá una nueva coalición.

Dirigentes del PPD consultados por La Radio calificaron como incomprensible la insistencia de Ignacio Walker de seguir sostiendo que hay Concertación para rato. Aseguraron que pareciera que el máximo dirigente democratacristiano estuvo en otra reunión.