Los principales medios de comunicación argentinos y españoles destacaron la controversial disputa que se ha producido a causa de la expropiación del 51% de la propiedad de la filial española de Repsol YPF en el país trasandino. Quienes comandaron la misión de expulsar a los ejecutivos, fueron -principalmente- un ejecutivo del gobierno argentino de la companía y el actual Ministro de Planificación.

Roberto Baratta, el único ejecutivo representante del gobierno de Argentina en el directorio de la empresa disputada, llegó con un decreto en mano que ordenaba la intervención de la compañía y el despido de una serie de ejecutivos argentinos y españoles. Según relata El País de España, “los enviados del Gobierno conminaron a los directivos españoles a hacer sus cajas de forma inmediata” para luego obligarlos a salir a la calle.

La presidenta argentina, Cristina Fernández, anunció inmediatamente la desvinculación de la actual plana ejecutiva para colocar al Ministro de Planificación, Julio de Vido, a cargo de la organización.

Ante tan complejo escenario, el mundo.es aseguró que Baratta apuntó al más alto directivo, Antonio Gomis, para decirle “que recogiera sus pertenencias y abandonara las oficinas”; mientras que el personal español restante no podrá seguir desempeñándose en la filial.

La prensa argentina también dio cuenta de la misma situación, pese a que la mayoría tomó una postura a favor del gobierno; a excepción del diario el Clarín, La Nación, la cadena de televisión TN, entre otros medios aludidos que fueron calificados de “pro-españoles”.

Desde el Clarín especificaron que el gobierno argentino dio la orden de cambiar la seguridad del edificio, por lo que durante la tarde se ordenó la custodia de la torre ubicada en Puerto Madero con “una patrulla de la fuerza de seguridad naval que valló las inmediaciones del edificio diseñado por el arquitecto Cesar Pelli”, durante la jornada de este lunes.