“Me parece que hay problemas que no se resuelven con leyes y, por tanto, decir, que vamos resolver las mil formas de discriminación que hay en el país por esta vía es una promesa que no se cumplirá”. Con esta reflexión, el diputado Enrique van Rysselberghe se refirió sobre los alcances reales que puede tener la Ley Antidiscriminación, la cual se discutirá mañana martes en la Cámara Baja.
Sobre el punto, el diputado UDI resaltó que si bien siempre estará abierto al debate, es necesario tener en cuenta que esta ley antidiscriminación se inscribe en la tendencia de pensar que el Estado debe legislar sobre la forma de vida y modo de ser de las personas, marcando aquello que no sólo es legalmente deseable, sino moral y éticamente posible.
Junto a ello, agregó: “más que leyes para castigar la discriminación creo que deberíamos incentivar esa fuerza integradora e inclusiva que tenemos como país en momentos adversos, como los que hemos vivido estos últimos años en nuestra región azotada por el terremoto y tsunami del 27-F”.
Por último, el congresista reafirmó la opinión del gremialismo en cuanto a que esta ley tiene que servir para el objetivo que está descrito, que es evitar cualquier tipo de discriminación, “pero si alguien quiere incluir otros temas, esos tienen que tener su propio texto legal y no aprovecharse de esta legislación”, concluyó.
