La policía del estado de California (sur de Estados Unidos) informó el lunes que investiga la muerte de una mujer iraquí-estadounidense asesinada a golpes en la ciudad de San Diego como un posible “crimen de odio”.

En tanto, el Departamento de Estado prometió que “no tolerará actos gratuitos de violencia”.

En la mañana del miércoles, Shaima Alawadi, una mujer de 32 años madre de cinco hijos, fue hallada inconsciente por su hija de 17 años en su casa en El Cajón, en el condado de San Diego. Murió en un hospital el sábado por heridas en la cabeza.

El jefe de la policía de El Cajón, Jim Redman, dijo a periodistas el lunes que una ventana de la casa de la víctima estaba rota y que se había hallado una nota cerca del cuerpo de la mujer, pero no quiso revelar qué decía. “Basándonos en el contenido de esta nota, no descartamos la posibilidad de que se trate de un crimen de odio”, dijo. “No estamos revelando el contenido de la nota, pero es de naturaleza amanezante”.

Redman señaló que la familia había recibido una nota similar a principios de mes pero que no la había reportado a las autoridades.

La hija adolescente de la víctima, Fátima Alhimidi, dijo a periodistas que su madre había sido golpeada con un objeto metálico y que la nota decía, en parte: “Vuelve a tu país, terrorista”.

Alawadi, que se había mudado a San Diego recientemente desde Michigan (noreste), llevaba sólo unas semanas viviendo en la casa.

Su marido, ex contratista del ejército estadounidense, había trabajado como asesor cultural para entrenar a los soldados desplegados en Medio Oriente.

El Departamento de Estado envió sus condolencias a la familia de la víctima.

Las autoridades estadounidenses están investigando “todos los aspectos de este horrendo crimen”, dijo la portavoz de la cancillería Victoria Nuland. “Estados Unidos no tolerará actos gratuitos de violencia como éste”, agregó.