Con el traslado de 368 reos desde la cárcel de San Miguel hacia la Ex Penitenciería de Santiago, concluyó la primera etapa de reacondicionamiento del recinto, que progresivamente se convertirá en un penal femenino.

La decisión no cayó del todo bien entre los funcionarios de Gendarmería, quienes recordaron el compormiso del Gobierno de no trasladar más reos al recinto.

El 120 por ciento de hacinamiento en el Centro de Orientación Femenina de San Joaquín, motivó a las autoridades a comenzar un proceso progresivo, de traslado de las imputadas hacia la cárcel de San Miguel.

Este jueves 368 internos de este recinto, fueron derivados hacia el Centro de Detención Preventiva Santiago Sur, a quienes se suman 60 reos de la torre 5, trasladados el miércoles hacia Colina 2.

La intención, según explicó el ministro de Justicia Teodoro Ribera, es habilitar un lugar digno para las mujeres, donde se pueda trabajar en la reinserción social.

Medida que criticó el presidente de la Asociación de suboficiales de Gendarmería, Juan Alarcón, quien asegura que el Gobierno rompió la promesa de no trasladar más reos hacia la Ex Penitenciería.

Por un plazo aproximado de 6 meses, la cárcel San miguel operará como un penal mixto. La idea es que de aquí a un año, el recinto funcione exclusivamente, como un centro de reclusión femenino, terminando con el hacinamiento en San Joaquín.