Cerca de 200 taxis colectivos se movilizaron por las principales calles de Osorno, ocasionando congestión vehicular, reclamando por las constantes alzas de los combustibles y la nula respuesta que ha dado el gobierno ante la eliminación del impuesto específico.

Desde las 11.30 y hasta las 13 horas, los conductores se paralizaron y a través de bocinazos y autos pintados manifestaron su malestar. Pero eso no fue todo. Antes, a las 10 de la mañana los colectiveros llegaron a hasta la gobernación provincial para entregarle una carta al gobernador Rodrigo Kauak en la que expresan diversos puntos.

Entre estos se encuentran las continuas alzas de los combustibles, que no les permite tener un ingreso mensual permanente; la intervención del estado en el libre mercado favorece a un gremio en perjuicio del otro, otorgándole beneficios que al otro perjudican. Y la modificación a las licencias de conducir y una diferenciación importante entre el conductor profesional y el particular.

Al respecto se refirió Juan Carlos Oliva, representante del gremio local en Osorno.

Otro de los puntos presentados en la carta tiene relación con la exigencia de terminales de taxis colectivos en la ciudad, ya que de los 900 existentes, ninguno cuenta con terminales autorizados por el ministerio de transporte.