Si bien no consiguió una medalla, el solo hecho de participar en la final del lanzamiento de martino, dejó contenta a Odette Palma, quien finalizó séptima en su disciplina.

Odette, indicó que disfrutó la competencia, ante rivales de gran nivel, sin embargo, no se encontraba nerviosa en la final. Además, confesó que mediante un teléfono celular se pudo contactar con su entrenador, para el último lanzamiento.

Respecto al bajo aporte económico que ha recibido, Odette Palma comentó que le da “rabia e impotencia”, pero prefiere no cegarse ante esas dificultades.

“Tengo 29 años y esto es mi vida”, destacó Palma, para posteriormente agregar que su deseo es llegar a Londres 2012, por lo que adelantó que moverá “cielo, mar y tierra” para obtener recursos, y golpeará puertas a más no poder.

Finalmente expresó que espera que en Chile entiendan su esfuerzo y le ayuden.