Más de un millón de espectadores asistió a los cuarenta partidos de la fase de grupos del Mundial de rugby que se terminó el domingo, con unos 25.000 de media por encuentro, pero los organizadores quieren continuar sus esfuerzos para alcanzar sus objetivos financieros.

En total, 1,07 millones de espectadores asistieron a los 40 primeros partidos, con unos ingresos totales de 262 millones de dólares neozelandeses (149 millones de euros).

Los organizadores señalaron que deberán conseguir 6,5 millones de dólares (3,7 M EUR) suplementarios procedentes de la venta de entradas para alcanzar sus objetivos financieros (268,5 millones de dólares neozelandeses).

Los organizadores cuentan sobre todo con los partidos de cuartos de final para aproximarse a los objetivos. De este modo, el lunes quedaban 16.000 entradas a la venta para el partido Inglaterra – Francia, y 10.000 para el encuentro Nueva Zelanda – Argentina del domingo.

Estos dos partidos, inicialmente programados en Christchurch, habían sido desplazados a Auckland tras el temblor de tierra que devastó la ciudad de la isla sur el 22 de febrero.

En Wellington, los dos partidos de cuartos de final están casi completos. Este lunes restaban 4.500 entradas a la venta para Irlanda – Gales del sábado y 5.000 para Sudáfrica – Australia del domingo.