Desde el lunes 25 de julio, tres estudiantes de la Universidad del Bío-Bío, sede Chillán, iniciaron una huelga de hambre indefinida, con el fin de protestar por lo que acusan ha sido la escasa voluntad política del Gobierno frente a la crisis educacional.

Se trata del estudiante de Pedagogía en Historia y Geografía, César Castillo; de Matías López, de la carrera de Pedagogía en Ciencias Naturales; y Maximiliano Duque, de Trabajo Social.

A través de un comunicado, los manifestantes aseguraron que “creemos que si la voluntad política del Gobierno va a reducirse a un cambio de ministro de Educación y a un llamado al diálogo bajo las exigencias planteadas en el GANE, los estudiantes universitarios tenemos mucho que perder”.

Dentro de sus exigencias dieron a conocer que esperan que “el Gobierno nos entregue fechas y plazos concretos a nuestras demandas que como estudiantes hemos planteado a través del petitorio Confech (…) que en estas conversaciones con el Gobierno no se deje de lado las demandas de los estudiantes secundarios que, al igual que nosotros, han adoptado la huelga de hambre como una forma de manifestación”.

Asimismo, llamaron a todas aquellas personas que quieran sumarse a la acción y aseguraron que la huelga no tiene ninguna influencia partidista, diciendo que “no se puede seguir aspirando a una educación gratuita, laica y de calidad si sus exigencias son ignoradas para beneficiar a quienes lucran con la educación”.

Finalmente, no descartaron que otros universitarios de sumen a la manifestación.