Una radiactividad muy alta fue medida este domingo en una capa de agua escapada del reactor 2 de la central nuclear accidentada de Fukushima (noreste de Japón), por lo que se procedió a suspender las operaciones de bombeo y a evacuar al personal, anunció la agencia de prensa Jiji.

El nivel medido en este agua hallada en el subsuelo de la sala de la turbina situada detrás del reactor, es de 1.000 milisievert por hora, declaró a la AFP un portavoz del operador Tokyo Electric Power (TEPCO).

“Esta cifra es 10 millones de veces más elevada que el nivel de radiactividad del agua que se encuentra generalmente en un reactor en buen estado”, explicó.

Ya se detectaron niveles de radiactividad de varios centenares de milisieverts por hora alrededor de los reactores dañados de la central, obligando a una evacuación temporaria del personal.

El jueves pasado tres obreros, calzados únicamente con botas de goma, sufrieron radiaciones al caminar en un charco de agua muy radiactiva durante una intervención en la sala de la turbina del reactor 3, donde el nivel de radiación era de 180 milisieverts por hora. Dos de ellos tuvieron que ser hospitalizados con quemaduras en los pies.

Unos 500 técnicos, bomberos y militares trabajan día y noche en Fukushima 1 para tratar de enfriar los reactores con cañones de agua, bombas eléctricas y una bomba de hormigón equipada de un brazo articulado de 50 metros capaz de modificar el nivel de las piscinas de combustible irradiado situadas sobre los reactores.