La catedral Notre Dame, la alcaldía, las Operas de Garnier y Bastilla, así como numerosos puentes, fuentes y plazas de París, quedarán a oscuras el sábado en la noche durante “La Hora del Planeta”, una operación para llamar la atención sobre los problemas del calentamiento climático.

Unas 129 ciudades francesas, entre ellas Lyon, Marsella y Toulon, deben sumarse a este movimiento mundial de extinción de las luces entre las 20.30 y las 21.30 locales, lanzado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).

La acción comenzó en Australia donde la iniciativa fue creada en 2007 para sensibilizar a la opinión al problema del consumo excesivo de electricidad y a la contaminación con dióxido de carbono.